jueves, 18 de marzo de 2010

Terremoto en Haiti


El terremoto de Haití de 2010 fue registrado el 12 de enero de 2010 a las 16:53:09 hora local (21:53:09 UTC) con epicentro a 15 km de Puerto Príncipe, la capital de Haití. Según el Servicio Geológico de Estados Unidos, el seísmo habría tenido una magnitud de 7,0 grados y se habría generado a una profundidad de 10 kilómetros.5 También se ha registrado una serie de réplicas, siendo las más fuertes las de 5,9, 5,5 y 5,1 grados. La NOAA descartó el peligro de tsunami en la zona.6 Este terremoto ha sido el más fuerte registrado en la zona desde el acontecido en 1770. El sismo fue perceptible en países cercanos como Cuba, Jamaica y República Dominicana, donde provocó temor y evacuaciones preventivas.
Los efectos causados sobre este país, el más pobre de América Latina,[cita requerida] han sido devastadores. Los cuerpos recuperados a 25 de enero superan los 150.000, calculándose que el número de muertos podría llegar a los 200.000.7 8 También habría producido más de 250.000 heridos y dejado sin hogar a un millón de personas. Se considera una de las catástrofes humanitarias más graves de la historia.9

lunes, 15 de marzo de 2010

Los humanos nos relacionamos con el medio natural






En muchas ocasiones y como de costumbre, se ha dejado de respetar y de proteger la vida de muchos animales. El mayor depredador del mundo, el hombre, ha vuelto a amenazar y a matar a diversas especies del reino animal. Esta vez Japón ha anunciado la próxima matanza de 500 ballenas en la Antartida

Los paisajes del Mundo




La selva,el desierto y la sabana.

El tiempo y la temperatura


Los climas del mundo

lunes, 8 de marzo de 2010

El amazonas


El relieve terrestre


El relieve terrestre hace referencia a las formas que tiene la corteza terrestre o litosfera en la superficie, tanto al referirnos a las tierras emergidas, como al relieve submarino, es decir, al fondo del mar. Es el objeto de estudio de la Geomorfología, sobre todo, al referirnos a las tierras continentales e insulares. La geomorfología es una de las ramas o ciencias principales que se engloban dentro de la Geografía física y de las Ciencias de la Tierra.

lunes, 1 de marzo de 2010

Prehistoria Neolitico


El Neolítico (Nueva Edad de Piedra) —por contraposición al Paleolítico (Antigua Edad de Piedra)— es uno de los períodos en que se considera dividida la Edad de Piedra. El término fue acuñado por John Lubbock en su obra de 1865 que lleva por título Prehistoric Times.

Proviene del griego νέος, néos: ‘nuevo’; λίθος, líthos: ‘piedra’. Inicialmente se le dio este nombre en razón de los hallazgos de herramientas de piedra pulimentada que parecían acompañar al desarrollo y expansión de la agricultura. Hoy en día se define el Neolítico precisamente en razón del conocimiento y uso de la agricultura o de la ganadería. Normalmente, pero no necesariamente, va acompañado por el trabajo de la alfarería.
El Neolítico (o Revolución agrícola) tuvo su desarrollo en Oriente Próximo, desde donde se extendió por Asia, Europa y África. Sin embargo, tanto en Asia Oriental como en América cabe pensar en un desarrollo autóctono, al menos en gran medida.

* Neolítico en Oriente Próximo
* Neolítico en Europa
* Neolítico en Asia Oriental
* Neolítico en América
* Neolítico en África

La etapa de transición entre el Paleolítico y el Neolítico se conoce como Mesolítico, mientras que las fases del Paleolítico tardío contemporáneas con el Neolítico y el Mesolítico en otras regiones del planeta se conocen como Epipaleolítico. Se denomina Subneolítico a un pueblo o comunidad de economía cazadora-recolectora que recibe algún influjo de tipo neolítico, típicamente la alfarería, de sus vecinos agricultores.
La palabra «neolítica» significa ‘de la piedra moderna’, siendo sinónima, en lenguaje prehistórico, de ‘piedra pulimentada’, por constituir uno de sus rasgos más característicos; otros la llaman también ‘de los animales domésticos’, por ser la época en que el hombre hizo definitivamente la conquista del perro, el caballo, el buey, el cerdo, etc.
J. Vilanova i Piera.[1]

Aunque Neolítico se traduce literalmente como ‘Nueva (edad de) Piedra’, quizás sería más apropiado llamarlo ‘Edad de la Piedra Pulimentada’; sin olvidar que la principal característica que define actualmente el período no es otra que una nueva forma de vida basada en la producción de alimentos a partir de especies vegetales y animales domesticadas. Abarca distintos períodos temporales según los lugares. Se sitúa entre el 7000 a. C. y el 4000 a. C. aproximadamente. Este período se inició en el Kurdistán antes del 7000 a. C. (quizás hacia el 8000 a. C.) y se difundió lentamente, sin que en Europa pueda hablarse de Neolítico hasta fechas posteriores al 5000 a. C.
Influencia del cambio climático [editar]

A partir del 8000 a. C., el cambio climático (época postglaciar) hizo huir a los rebaños de renos hacia el norte, provocando una disminución de la caza. Declinó la cultura, volviendo el hombre a las cuevas (aunque en algunos casos aislados se conservaron las chozas). El culto a los difuntos y los rituales funerarios se hicieron más complejos. Esta época es llamada «período de marasmo» y se sitúa en el final del Mesolítico y el principio del Neolítico. Este cambio de clima hacia el 8000 a. C (en que se pasó a un clima templado) hizo que el hombre modificara sus costumbres (lo que se facilitaría por los cambios climáticos —templado, frío, templado, frío— del período entre el 12000 a 8000 a. C.).

Las diferencias culturales de una zona a otra son perceptibles pero resulta imposible dar otro calificativo a los hombres que pueblan extensas zonas que la de Homo sapiens u Hombre de Cro-Magnon, sin que puedan establecerse diferencias étnicas regionales que necesariamente hubieron de darse por el desarrollo separado de los distintos grupos, el ambiente geográfico distinto, la diversa climatología, los hábitos alimentarios diferentes y las múltiples costumbres locales.

Del establecimiento de la ganadería y de una economía de base ganadera surge la trashumancia, que pone en contacto a los pueblos y, consecuentemente, facilita la comunicación entre gentes de culturas, tierras y tribus diversas. La emigración de tribus y la difusión de técnicas, que cada grupo aprende del grupo vecino, va extendiendo las culturas neolíticas desde su foco originario hacia el resto del mundo. De estos contactos y del desarrollo simultáneo de la agricultura surgen, entre otras cosas, los primeros molinos manuales para moler los granos que se cultivan.
Fases del Neolítico [editar]

El Neolítico se divide en tres fases:

* Neolítico inicial (I fase)
* Neolítico medio (II fase)
* Neolítico final (III fase).

Características de este período son la completa domesticación de algunos animales (el asno, el caballo, el reno y otros), la sustitución de los útiles de piedra tallada por los de piedra pulimentada (que no es la novedad más importante, si bien es la que da nombre al período), una práctica desaparición de las manifestaciones artísticas y el desarrollo de los cultivos en la primera fase, seguida de un decaimiento general.
Surgimiento de la agricultura y los poblados [editar]

Puede seguirse el Neolítico con relativa exactitud en la zona de Canaán, región en donde surgen culturas agrícolas, sedentarias (las primeras culturas agrícolas surgieron sin duda en el Sudeste de Anatolia (Çatalhöyük) hacia el 8000 a. C.) probablemente antes del 7000 a. C. Se sabe de la siembra, recolección y almacenaje de cereales, y se sabe que domesticaron algunos animales, y entre ellos, el primero, el perro[cita requerida]. Se construyeron poblados de casas de adobe, con cubierta plana, aproximadamente rectangulares en medianería, sin calles y con entrada por la cubierta. También cabañas circulares, semi-subterráneas, de una sola cámara, con los muros y el suelo cubiertos de barro (Jyroquitya, en Chipre).

La innovación se difundió con extrema rapidez y antes del 7000 a. C. ya se constata al menos una aldea, Jericó, con una superficie de unas cuatro hectáreas (cuatro manzanas), con una muralla de piedra y un foso excavado de unos 8 metros de ancho por 3 metros de fondo, y con, al menos, una gran torre circular de 9 m de altura, que se pensó servía como torre de vigilancia, con escalera para acceder al techo y a la parte alta de la muralla, pero que realmente resultó ser un muro contra inundaciones y un almacén de grano.

Esta primera cultura neolítica (Neolítico pre-alfarero) duró desde aproximadamente el 7500 a. C. al 6500 a. C. y fue sustituida por otra «invasión» desde el norte, de Anatolia, que duró también unos mil años (6500 al 5500 a. C.); siguió después otra cultura neolítica procedente también del norte, que subsistió otros mil años (5500-4500 a. C.). Estas culturas se fueron difundiendo por toda Eurasia, acelerándose la difusión después del 5000 a. C., fecha en que puede fijarse el inicio del periodo neolítico en el continente europeo, alcanzando poco después la Península Ibérica.
Utensilios agrícolas típicos del Neolítico y sus posibles empleos a través de antiguas representaciones egipcias.
La alfarería [editar]
Alfarería neolítica.

Un descubrimiento de capital importancia para la vida del hombre, y que tuvo un desarrollo muy rápido, es la alfarería. Permitió la construcción de recipientes para líquidos y facilitó enormemente la vida del hombre, que ya no necesitaba estar permanentemente en las cercanías del agua, o realizar a menudo largos recorridos para abastecerse, pues almacenaba el agua, y también granos, semillas, productos molidos, etcétera, en los recipientes de alfarería. Solo necesitaba desplazarse periódicamente para renovar el abastecimiento de la cantidad consumida desde el suministro anterior.

Antes se usaban calabazas vacías (que podían contener agua pero no podían ponerse al fuego) y cestos de mimbre (que no podían contener agua). Posteriormente estos recipientes de mimbre se impermeabilizaron con la arcilla seca al sol o cocida al fuego. Más tarde aprendieron a dar la forma a la arcilla con un esqueleto de mimbre muy simple y luego sin esqueleto. La forma era a menudo de calabaza y las dimensiones parecidas al cesto de mimbre.

Los cazadores usaban en raras ocasiones las piezas de arcilla (por ejemplo, no servían como carcaj por su fragilidad), prefiriendo las de mimbre o de tejidos. En cambio, a los ganaderos y agricultores les proporcionaba seguridad en el almacenamiento de agua y otros productos lo cual, junto con los medios de conservación de la carne, les hacía menos dependientes de la caza diaria.

En esta época se difunde el uso de las piezas de alfarería, cuya utilización en la Península Ibérica es segura, existiendo restos del Neolítico medio.

Aparecida la alfarería, el hombre intenta decorarla. Hay indicios de que las primeras decoraciones se hacían con cuerdas, utilizadas a menudo de refuerzo, pero después se introdujeron otras variantes: la acanaladura, el cordón (línea en relieve a modo de cuerda, ligeramente debajo del borde) y las asas de diversos tipos.

La cerámica de la época inicial (hacia el 4000 a. C.) es de la llamada «cardial», con incisiones de diversos tipos en la arcilla blanda pero ya moldeada, hechas con los dedos o con punzones o espátulas de hueso o piedra pulida. Recibe el nombre de cardial por estar producidas la mayoría de las incisiones con la concha de un molusco llamado Cardium edule (berberecho). Las incisiones, a menudo combinadas, buscaban efectos simétricos.
La vida en el Neolítico [editar]
Hacha pulida.

El cambio climático provoca una lenta conversión de la economía de subsistencia, basada en la caza, hacia una economía más estable de base ganadera y apoyada en los cultivos. Se aprecia que el hombre deja las montañas para desplazarse hacia los llanos en persecución de sus presas de caza. El hombre vuelve a las cuevas aunque en algunos puntos pudo conservar la utilización de chozas en las cercanías de ríos.

El desarrollo de la ganadería da lugar a la trashumancia y a los contactos relativamente frecuentes con gente de otras tierras, existiendo una mayor intercomunicación entre las diversas tribus. Para las hachas y otros instrumentos se utiliza la piedra pulida y los útiles y algunas herramientas se fabrican frecuentemente con hueso. Aparecen también útiles de obsidiana.
El culto a los muertos [editar]

El culto a los muertos empieza a desarrollarse y aparecen los primeros megalitos (en realidad el culto a los muertos apareció hace 30.000 años, como lo demuestra el enterramiento de la cueva de Morín, en Cantabria).
Trenzados de fibras [editar]
Utensilios relacionados con la ganadería, típicos del Neolítico y sus posibles empleos a través de antiguas representaciones mesopotámicas.

Empiezan a usarse los primeros trenzados de fibras. Probablemente los primeros se hicieron toscamente con ramas. La técnica fue evolucionando hasta llegarse a cestos bastante bien logrados en el Neolítico, producto de la necesidad de recolección de frutos, que existía hacia cientos o miles de años. Los cestos se hicieron de mimbre. En éstas, los humanos se dieron cuenta, por causas desconocidas, quizás por casualidad, de que algunos productos, como la lana, el lino y el cáñamo (y luego otros) podían estirarse mediante un tosco huso o una barra de madera redonda, a modo de imitación de los tejidos de los cestos podían tejerse estos hilos y fabricar telas. Seguramente al principio se pensó utilizar el invento para hacer cestas más ligeras, antes de destinarlos a telas de vestidos. Otra prenda muy difundida es el saco, tejido en esparto.
Manejo de los animales [editar]

En este período el hombre ha domesticado al perro.ª El hueso se usa frecuentemente.

Para conservar la carne se usa el sistema del acecinado, secado al sol o salado, colocándola colgada en el centro de una figura de tres estacas con el suelo en el mismo vértice.

La habilidad manual de los pobladores de la época se utilizaba en la preparación de trampas de cuerdas de cierta complejidad. El animal capturado por las cuerdas anudadas tendidas por el hombre, era rematado después por este. El desarrollo de las trampas coincide con el culto a la araña, extendido por todas las culturas neolíticas de Europa Occidental y otras, culto probablemente vinculado a la habilidad de este pequeño animal para colocar sus trampas, las telas de araña.

El humano estaba habituado a seguir las huellas de los animales y es notoria la especialización que habían alcanzado, hasta el punto de que en las pinturas rupestres, en los pies están representadas perfectamente las pezuñas tal y como se marcaban en el suelo. Al parecer, por las representaciones pictóricas, los hombres corrían a una altísima velocidad, persiguiendo a sus presas.

De esta época son también las primeras cucharas, que no se usaban para comer sino para mezclar los alimentos en cocción.

En esta época, a raíz de capturas de jabalíes vivos (jabatos), principalmente hembras, estos animales fueron domesticados y dieron origen al cerdo (en general el jabalí era una pieza de caza). A menudo se representan en las pinturas rebaños de jabalíes que no son objeto de caza y que podría tratarse de rebaños en proceso de domesticación.
Las danzas rituales [editar]

Las danzas rituales, asociadas a ritos de fertilidad y a las prácticas religiosas (que ahora desconocemos) de la época, siguen practicándose. Probablemente, cada grupo disponía de un hechicero, que se adornaba con una cabeza de toro salvaje hueca y una piel de toro que incluía la cola. Estos hechiceros son los que aprendían y difundían las nuevas técnicas, trasmitían sus conocimientos a su sucesor o sucesores y hasta es posible que fueran los autores de las pinturas rupestres pues en general estas se suponen asociadas a ritos religiosos o mágicos.

Los hechiceros tenían vagos conocimientos astronómicos (observaban el cielo y en una pintura esta representada la Osa Mayor); observaban las costumbres de los animales, salvajes o no, para hacer más fácil su captura o imitarlos (por ejemplo la araña, pero también otros) y ensayaba sobre vegetales, comestibles o no.
Ejecuciones y asambleas de guerreros [editar]

Existen representaciones de ejecuciones: una falange de guerreros, entre los que parece distinguirse uno de los demás por su posición y por el uso de una pieza en la cintura, y que probablemente debía ser el jefe del grupo, dispara flechas contra un condenado. En este período se celebraban asambleas o reuniones de guerreros, representadas no solo para las ejecuciones, creyéndose que tenían importancia política o religiosa. Se representan escenas con unos veinte guerreros lo que demostraría la existencia de grupos de unos cien individuos o más, ya que hay que incluir a las mujeres, niños, ancianos, adolescentes, hechiceros y sus ayudantes, centinelas, y otros (se supone que la población de [Çatalhöyük] era de unos 3000 habitantes). Se cree que la asamblea de guerreros ejercía un poder decisorio. Por algunas representaciones se deduce que la asamblea, si no tenía carácter militar, tenía una finalidad religiosa, venerándose a las pinturas de los grandes animales o a estos mismos (de la veneración de las pinturas neolíticas existe constancia en épocas posteriores, incluso en tiempos de los romanos, presumiéndose que la tradición de su veneración continuó sin interrupción desde el Neolítico al periodo romano).
Las primeras ciudades [editar]

Los densos agrupamientos de aldeas y pequeñas ciudades, confinados en principio a los márgenes de las corrientes de agua naturales, tuvieron que recurrir cada vez más al regadío artificial para regar sus campos de trigo y cebada. Hacia el 6.350 A.C. se levantaron templos monumentales de ladrillo de adobe en el centro de importantes ciudades como Eridu y Al Ubaid. Las primeras ciudades surgieron en la zona de Oriente Próximo entorno a los 7000 años de antigüedad y asociadas a las primeras culturas neolíticas. La cercanía de los ríos Eufrates y Tigris permitió el cultivo de cereales y otras plantas que podían ser regadas por medio de las obras de canalización que realizaron los habitantes de estas primeras ciudades. Surgieron también los primeros edificios públicos que caracterizan a la ciudad, los palacios y los templos. Unos y otros funcionarán como grandes oficinas administrativas en las que se llevaba el control de la producción de alimentos y del comercio. La necesidad de administrar esta información llevó a la aparición de sencillas formas de anotación, contabilidad y escritura.
La miel y las bebidas [editar]

El uso de la miel continúa. Su importancia deriva del hecho de que era el único alimento dulce conocido, igual que la sal era el único salado. Además, de los panales se obtenía la cera, que seguramente se usaba en rituales mágicos, religiosos o funerarios.

De la miel se obtuvo en una época indeterminada el hidromiel, solución acuosa de miel que a consecuencia de la fermentación alcohólica ha perdido toda o parte de la materia azucarada y se ha convertido en alcohol etílico, siendo parecido en su sabor a algunos tipos de vino. El hidromiel tenía un color brillante y dorado, que lo asemejaba igualmente a ciertos vinos. Para fabricar hidromiel se usaba el agua utilizada para lavar utensilios que habían contenido miel, a la cual se añadía miel (25% de miel y 75% de agua) con el polen extraído de los panales para su fermentación (0,05%), creándose una bebida de unos quince grados.

Otra bebida es la cerveza, que es anterior a los cultivos. Se cree que los pobladores neolíticos calentaban al máximo una piedra hueca conteniendo agua y plantas silvestres, fermentándolo con las mismas hierbas masticadas y escupidas en el líquido. Este procedimiento se usaba aun en la industria lechera vasca a principios del siglo XX para fabricar cuajada o mamilla (si bien la leche se introducía en recipientes de madera en los que se introducían las piedras calientes). Fue en Egipto donde se aprendió a elaborar la cerveza con cebada, sistema que probablemente no alcanzó Europa hasta el período de los indoeuropeos o celtas.

No se conocía el vino ni tampoco el aceite, usándose grasas animales. Sin embargo, a raíz de la domesticación del ganado se conocía la leche, aunque solo se usaba la de cabra, no difundiéndose el uso de la leche de vaca hasta la época romana.
Las harinas [editar]

El trigo, que era una planta silvestre difundida en Asia menor, fue cultivado desde antiguo en Oriente Medio y su cultivo se difundió en el Neolítico llegando a Europa hacia el 5000 a. C. Se comían los granos de trigo y otros cereales. Más tarde se trituraron, comiéndolos triturados o convertidos en pasta. A veces también se comían los granos hervidos.

Los sistemas de moler harina con molinos de piedra se difundió en el Neolítico. La pasta o masa de harina y agua se cocía en piedras calientes. Más tarde se descubrió el sistema de fermentación y su cocción comenzó a realizarse en hornos cada vez más evolucionados. Se fabricaba el pan con harina de trigo, de cebada y de centeno, y probablemente también con de otros cereales como mijo y avena.
Arte neolítico [editar]

El estilo naturalista del Neolítico, abierta a las sensaciones y a la experiencia, se transforma en una intención artística geométricamente estilizada, cerrada a la riqueza de la realidad empírica. En lugar de las minuciosas representaciones fieles a la naturaleza, plenas de cariño y paciencia para los detalles del modelo correspondiente, encontramos por todas partes signos ideográficos, esquemáticos y convencionales, que indican más que reproducen el objeto. El arte neolítico tiende a ahora a fijar la idea, el concepto, la sustancia de las cosas, es decir a crear símbolos en vez de imágenes.

El cambio de estilo que conduce a estas formas de arte completamente abstractas depende de un giro general de la cultura, que representa quizá el corte más profundo que ha existido en la historia de la humanidad.

Del Neolítico se conservan grandes monumentos megalíticos, entre ellos:

* Los menhires: monolitos verticales ocasionalmente antropomorfos, con los que se hacía culto al sol.
* Los dólmenes: sepulturas construidas con dos o más piedras verticales cubiertas por una losa horizontal.
* Los crómlechs: conjuntos de menhires y dólmenes de forma circular que solían tener carácter religioso.

Además en este período se desarrolló un estilo de pintura rupestre en la zona levantina de la Península Ibérica basado en la pintura de escenas de caza en rocas al aire libre, con representaciones esquemáticas de figuras humanas.
El Neolítico medio o pleno [editar]

Se puede situar el Neolítico medio o pleno entre el 3500 a. C. y el 2500 a. C.

Es en este período que la alfarería alcanza su mayor difusión, con la importancia que tuvo para la vida del hombre. La alfarería de entonces corresponde al tipo llamado de alfarería con acanaladura que da idea de un mayor desarrollo de la cerámica en general.

Llama la atención en este período la desaparición de los cultivos agrícolas, que adquirieron bastante desarrollo en la etapa anterior, y que en esta casi se extinguen o cuando menos retroceden en forma notoria. No se conoce la causa que motivó este fenómeno general.

Parece ser que este período provocó desplazamientos masivos de poblaciones que se asentaron en determinadas zonas geográficas. En Cataluña se percibe claramente el asentamiento de una población procedente seguramente de Suiza y del norte de Italia, que empujó a los primeros emigrantes orientales del período anterior más al Sur. Los emigrantes instalados en Cataluña, que constituyen la Cultura de las sepulturas de fosa, aportaron una cultura de base agrícola y ganadera, que establecía sus poblados en cabañas en los llanos, enterrándose en fosas como sepultura, distintas de la sepultura en cuevas, lo que demuestra que no las utilizaban. Sin duda pasada la primera época de invasión, y asentada sólidamente la población, estos emigrantes pudieron adoptar nuevas costumbres funerarias, religiosas, económicas y sociales, influidos no solo por la cultura de donde procedían, sino también por los restos de la cultura mesolítica anterior a la primera emigración oriental, y por esta primera cultura oriental.

La trashumancia puso en contacto a los pobladores de diversas regiones. Así la cultura arcaizante, Asturiense, de la cornisa Cantábrica y Aquitania, la Cultura de las Cuevas en el Valle del Ebro (neolítica), y la Cultura de los Sepulcros de fosa en Cataluña.

En esta época ya aparecieron algunos elementos de bronce en Francia, hacia el final del período.

Prehistoria Paleolitico


El Paleolítico medio es un período de la prehistoria humana caracterizado por el predominio de la cultura Musteriense y del método Levallois,[1] que consiste en obtener una o varias lascas de forma predeterminada, a partir de una preparación particular del núcleo. Es un período es menos extenso que el anterior (Paleolítico Inferior) y abarca aproximadamente entre los años 130.000[2] y 33.000 a. C.
Inicialmente el Paleolítico Medio fue definido por la existencia del Homo neanderthalensis, que se suponía una especie intermedia entre el Homo erectus y el Homo sapiens. Posteriormente, se dilucidó que la evolución del género Homo hasta el sapiens, fue más compleja y que, H. neanderthalis no antecedió a H. sapiens,[3] sino que fue una especie de origen europeo, que por más de 150 mil años tuvo una existencia paralela al H.sapiens, originario de África.[4] Se ha encontrado ya en el valle del río Omo, al sur de Etiopía, un fósil de H. sapiens, Omo I,[5] que data de hace 195 mil años.[6] Para completar, se demostró que en Asia el H. erectus sobrevió en un área extensa y por milenios, cuando las otras dos especies ya se dispersaban[7] y además, dio origen en ciertas áreas de la actual Indonesia, a una cuarta especie, Homo floresiensis,[8] con una adaptación especializada a los bosques. No hubo pues un proceso lineal de evolución y la visión del Paleolítico Medio que le correspondía, resultó ser meramente europea y por tanto verificable solamente en aquellas áreas donde el H. sapiens remplazó al H. neanderthalis tardío, es decir de Europa y el norte de Africa hasta Irán y Uzbequistán, pero no en el resto de Asia ni mucho menos en las regiones de Africa donde surgió el H. sapiens.
El cambio cultural característico del Paleolítico Medio, coincidió con la aparición y expanción de nuevas especies de Homo a partir del H. erectus o de los relacionados con él H.ergaster y H. antecessor. Se sabe que en Europa desde hace por lo menos 500 mil años y hasta hace 250 mil años el escenario estuvo dominado por los Homo heidelbergensis. Sus utensilios asociados con los fósiles consisten básicamente en "piedras de cortar" y algunas herramientas de lascas como puntas y raspadores de madera, hueso y astas, siendo los iniciadores de esta técnica. Dentro de su tecnología encontramos el bifaz, también llamado hacha de mano; es de grandes dimensiones y está tallado por ambas caras. Su utilidad es muy diversa. Según análisis de otras piedras muestran su empleo para curtir pieles o trabajar la madera, hace 400.000 años ya usaban rudimentarias lanzas de madera. Dentro de esta especie es evidente la existencia pequeños grupos con una cohesión social, ya que según estudios paleontológicos de diferentes restos se han hallado, por ejemplo, mandíbulas totalmente edentadas; esto indica que el anciano, tras perder su dentadura, siguió viviendo ayudado por sus congéneres. También se ha detectado una conducta diferencial a la hora del tratamiento de sus cadáveres.

En África es evidente un cambio en el trabajo de las herramientas datadas, a partir de 600 mil antes del presente: son menos gruesas, más simétricas y mejor pulidas, con respecto a las anteriores de características Achelenses. Este cambio coincide con la datación de 630.000 a.P. estimada para el especimen fósil encontrado en Bodo.[9] Se discute si esta especie africana es la misma H. heidelbergensis o si es diferente,[10] designada como Homo rhodesiensis,[11] y de la cual, en todo caso, se han encontrado otros fósiles en una docena de lugares de Africa, cubriendo un período entre los 630 y 160 mil años antes del presente.
Ahora se reconoce la especificidad de la Edad de Piedra Intermedia en Africa. En Kenya (Guomde, Malewa Gorge, Kapthurin,[12] Kapedo Beeds[13] ) y Etiopía (Gademotta) se han encontrado los útiles más antiguos de este período. En las cercanías del Lago Eyasi (Tanzania) fueron encontrados fósiles de por los menos dos individuos designados en 1939 como Africanthropus njarasensis,[14] asociados con una industria del tipo Levallois, que se ha datado en 250 mil años antes del presenta y varios expertos clasifican los fósiles humanos asociados como Homo rhodesiensis.

La industria lítica Fauresmithiense, descubierta el la localidad de Fauresmith Suráfrica, consta de bifaces, hendidores, raederas y lascas Levallois. Probablemente de ella se desarrolló las cultura Stillbayense de finas puntas foliáceas y su sucesora de Howiesons Poort.[15]

La industria denominada Sangoense consta de piezas sobre lasca, talladas mediante el método Levallois y además de útiles macrolíticos, como piezas bifaciales, picos y hachas, a menudo triangulares. Fue identificada en 1920 en Sango Bay, en orilla este del lago Victoria (Uganda) donde este tipo de cultura. El yacimiento de Kalambo Falls, en Zambia,[16] contiene una secuencia con estratos sangoenses datables entre los 100.000 y los 80.000 años de antigüedad, pero esta industria podría remontarse más allá de los 200.000 años de antigüedad.
La cultura Musteriense expresó la expansión del Hombre de Neanderthal por Europa y áreas vecinas. A lo largo de milenios el Hombre de Neandertal desarrolló un tipo de vida sin apenas variación. Se protegía del frío en las cuevas, en algunas de las cuales se han encontrado rastros de fuego. Todos sus días estaban ocupados en la caza, básica para alimentarse. Usaban adornos, como collares. Cuando un individuo moría era enterrado en una fosa, que en algunos casos tenía fosas secundarias a su alrededor, y con el difunto se enterraban animales -probablemente como ofrenda- así como instrumentos o comida, por lo que se deduce la creencia en una vida después de la muerte, y se puede afirmar que aunque no eran H.sapiens, eran humanos en el más espiritual de las creencias y los sentimientos, en el de la mente.[17] Se han encontrado además, en Regordou (Francia), unas estructuras de piedra a modo de sarcófagos excavados en la pared, que albergaban en su interior uno o varios cráneos de osos, convenientemente alineados, lo que se ha interpretado como un culto al oso de las cavernas.

La industria musteriense[18] es de lascas gruesas, con talla a base de muescas directas sobre el sílex. Los intrumentos típicos encontradas son raspadores y puntas triangulares grandes, con retoques en los bordes y retocados por compresión. Son característicos los instrumentos con mangos. Las herramientas fueron producidas usando martillos de percusión blandos, como huesos o madera. En los últimos tiempos de los neandertales, se nota en el registro arqueológico el estilo Châtelperroniense, considerado como más "avanzado" que el musteriense.

Del Paleolítico Medio proviene la mandíbula encontrada en Bañolas (provincia de Gerona, España) que corresponde a un hombre de Neanderthal clásico. De la misma época es un humero neanderthaliense, y algunas muelas, hallados en Mondragón y en Dima (Vizcaya). De este periodo se han hallado en Navarra algunos utensilios en la Sierra de Urbasa, destacando los de Coscobilo, en Término de Olazagutía, que presenta a menudo el sílex en placas.

Los continentes

El relieve terrestre


El relieve terrestre hace referencia a las formas que tiene la corteza terrestre o litosfera en la superficie, tanto al referirnos a las tierras emergidas, como al relieve submarino, es decir, al fondo del mar. Es el objeto de estudio de la Geomorfología, sobre todo, al referirnos a las tierras continentales e insulares. La geomorfología es una de las ramas o ciencias principales que se engloban dentro de la Geografía física y de las Ciencias de la Tierra.